¡Solo con ÉL!
"Permaneced en Mí, y Yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en Mí" (Juan 15.4).
Hay una enseñanza de JESÚS que siempre resuena entre los creyentes en CRISTO: "Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en Mí, y Yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de Mí nada podéis hacer" (Juan 15.5). Y cualquier persona que alguna vez tomó un camino contrario a la voluntad de DIOS, sabe cuan cierta es esa enseñanza.
Los caminos de DIOS deben ser transitados con (o en) el SEÑOR; y si queremos intentar hacerlo por nuestra cuenta o a nuestra manera, fracasaremos rotundamente (Juan 15.4-5). Como creyentes en JESÚS, no podemos depender de nosotros mismos, ni confiar en nuestras fuerzas; ya que si lo hacemos, no podremos (en cualquier situación de la vida diaria), discernir correctamente la voluntad del SEÑOR.
Hacer nuestra propia voluntad solo muestra que estamos alejados de DIOS, y que nuestra mente o pensamientos, son opuestos a los del SEÑOR. Como creyentes en CRISTO JESÚS, tenemos la mente de CRISTO (1° carta a los Corintios 2.16b); es decir, que tenemos la facultad dada por el SEÑOR, para permanecer en ÉL y obedecerlo.