Perdón completo y permanente
"Yo, Yo soy el que borro tus rebeliones por amor de Mí mismo, y no me acordaré de tus pecados" (Isaías 43.25).
Los creyentes en JESÚS, solemos hablar de que el ser humano es pecador delante del SEÑOR; no solo por naturaleza, sino también por elección propia. Pero al mismo tiempo, hablamos de que el ser humano necesita el perdón de DIOS; el cual, solo puede ser hallado a través de JESUCRISTO. Y estas cosas no las hablamos porque se nos ocurren, sino porque la misma Escritura (nuestra norma de fe y conducta) lo enseña.
Pablo, en su carta a los Romanos expresó: "Todos se desviaron, a una se hicieron inútiles; no hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno" (Romanos 3.12). Y también, "Todos pecaron, y están destituidos de la gloria de DIOS" (Romanos 3.23).
Por otra parte, el autor del Salmo 130, sabía que solo DIOS podía (y puede) hacer algo con esa condición que nos condena a una eternidad sin DIOS. Él dijo: "JAH, si mirares a los pecados, ¿Quién, oh SEÑOR, podrá mantenerse? Pero en Ti hay perdón, para que seas reverenciado" (Salmo 130.3-4).
Cuando por la fe vamos al SEÑOR arrepentidos, ÉL borra y se olvida de nuestros pecados (Isaías 43.25). Juan lo expresó con estas palabras: "Si confesamos nuestros pecados, ÉL es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad" (1° carta de Juan 1.9).
¡Así de completo y permanente es Su Perdón por nosotros!