Nuestros días
"Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría" (Salmo 90.12).
Cuando era niño, solía emocionarme por una planta que se llama 'dama de noche'; cuya flor, solo dura abierta una noche, y luego se marchita. Recuerdo que me quedaba esperando (muchas veces), solo con el objetivo de poder ver abierta esa flor extraordinaria.
La poca durabilidad de esa flor, me lleva a pensar en lo que nos enseña uno de los Salmos de David: "El hombre, como la hierba son sus días; florece como la flor del campo, que pasó el viento por ella, y pereció, y su lugar no la conocerá más" (Salmo 103.15-16).
Santiago escribió en su carta: "Porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es neblina que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece" (Santiago 4.14).
Sabemos que nuestra vida es "como la sombra que pasa" (Salmo 144.4b), y que ninguno de nosotros tiene el control sobre su duración; sin embargo, podemos enfocarnos en lo que vale la pena y vivir nuestra vida de forma que agrade a DIOS.
El Salmo 90, es un registro de una oración que hizo Moisés; y en uno de sus versos expresa: "Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría" (Salmo 90.12).