Lo que JESÚS hizo por nosotros
"Por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por ÉL se acercan a DIOS, viviendo siempre para interceder por ellos" (Hebreos 7.25).

Aunque JESÚS tuvo una vida perfecta, murió en la cruz como si hubiese sido un pecador; y lo hizo para pagar la deuda que cada ser humano tiene, ya que el pecado nos aparta del SEÑOR (Romanos 3.23 y 6.23). Y esa obra que JESÚS hizo en la cruz del calvario para salvarnos, fue aceptada por el PADRE porque es perfecta y suficiente. Además de esto, al tercer día ÉL resucitó, tal como había dicho cuando caminó por esta tierra (Mateo 17.22-23 y 28.6).
Y es gracias a ese sacrificio de JESÚS (con sangre), que no tenemos que vivir apartados de ÉL, pues nos ofrece Su gran regalo: la salvación de nuestras almas (Efesios 2.8-9).
Por lo tanto, necesitamos creer en JESÚS (Hechos 16.31), para que ÉL nos haga nuevas criaturas (2° carta a los Corintios 5.17) y comencemos a tener una relación personal con el PADRE Celestial.
Podemos tener una relación personal con el SEÑOR, porque ÉL vive e intercede por nosotros (Hebreos 7.25).