Guiados por el SEÑOR
"Así ha dicho JEHOVÁ, Redentor tuyo, el Santo de Israel: Yo soy JEHOVÁ DIOS tuyo, que te enseña provechosamente, que te encamina por el camino que debes seguir" (Isaías 48.17).
Hay un gran contraste entre lo que DIOS quiere de Sus hijos amados, y de lo que Satanás quiere lograr en las vidas de aquellos que creemos en el SEÑOR.
Por un lado, DIOS nos llama a los creyentes en JESÚS, para que trabajemos en el Reino de DIOS y hablemos a las personas acerca de JESÚS; Satanás busca y espera que nos desanimemos lo suficiente como para no seguir sirviendo al SEÑOR. Él es muy astuto y siempre querrá frustrar el plan de DIOS para la vida de los creyentes en CRISTO, debilitando y/o destruyendo su fe. Pero DIOS nos conoce y nos da valor para que hablemos de ÉL (Mateo 28.19-20 e Isaías 48.17).
Por otra parte, cualquier creyente en JESÚS que esté decidido a obedecer al SEÑOR compartiendo el Evangelio, es una amenaza para el Diablo, pues él no quiere que la obra de DIOS avance; y cuando ve que el SEÑOR nos fortalece y guía, tratará de hacernos tropezar.
Somos hijos de DIOS y "porque no nos ha dado DIOS espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio" (2° carta a Timoteo 1.7), podemos y debemos servir a DIOS en Su Reino, porque ÉL nos guía con Su ESPÍRITU y Su Palabra.