¡El más alto precio!
"Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con DIOS por la muerte de Su HIJO, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos por Su Vida" (Romanos 5.10).
JESÚS dio Su vida voluntariamente para que nosotros, a pesar de nuestros pecados, podamos ser salvos. ÉL no fue obligado a hacerlo, sino que se ofreció a Si mismo por nuestros pecados para librarnos (Gálatas 1.3-4); y esto lo hizo por amor a nosotros.
ÉL puso Su propia vida para reconciliarnos con el PADRE (Romanos 5.10); y sin ese sacrificio, nosotros no tendríamos esperanza y estaríamos totalmente perdidos y condenados, pues no habría en quién creer (Juan 3.18). Pero si creemos en JESÚS como nuestro SEÑOR y SALVADOR, ese sacrificio que ÉL hizo en la cruz del calvario, tendrá efecto en nosotros, y seremos limpios de nuestros pecados por la Sangre de CRISTO (1° carta de Juan 1.7).
Los creyentes en JESÚS, hemos sido rescatados por el SEÑOR con algo incorruptible: La sangre preciosa de CRISTO, la cual no tiene mancha ni contaminación (1° carta de Pedro 1.18-19). Y ese... es un precio muy alto (1° carta a los Corintios 6.20).