Creados
"Así dice JEHOVÁ, Hacedor tuyo, y el que te formó desde el vientre, el cual te ayudará..." (Isaías 44.2a).
En este mundo hay una creencia que dice que el ser humano es el resultado de la evolución; creencia que incluso es enseñada en las escuelas públicas. Pero, la teoría de la evolución es solo eso... una teoría; cuyos fundamentos son insólitos y sin sentido. Claramente, no somos el producto de algo que fue cambiando en el tiempo (evolución); sino que somos el resultado de la obra creadora de DIOS.
En el libro del profeta Isaías leemos: "Ahora pues, JEHOVÁ, Tú eres nuestro PADRE; nosotros barro, y Tú el que nos formaste; así que obra de Tus manos somos todos nosotros" (Isaías 64.8).
DIOS se ocupó de formar al hombre y a la mujer, y lo hizo conforme a Su imagen (Génesis 1.27; 2.7 y 2.22). Luego, de esa creación, todo el resto de los seres humanos hemos sido formados de la manera que lo expresó David en uno de sus Salmos: "Porque Tú formaste mis entrañas; Tú me hiciste en el vientre de mi madre... No fue encubierto de Ti mi cuerpo, bien que en oculto fui formado, y entretejido en lo más profundo de la tierra. Mi embrión vieron Tus ojos..." (Salmo 139.13, 15 y 16a).
Creer que DIOS nos creó, tiene más sentido que creer que hemos evolucionado.