La Paz de DIOS y la paz del mundo
"Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en Ti persevera; porque en Ti ha confiado" (Isaías 26.3).
Mientras que este mundo ofrece una paz pasajera, y muchas veces, incluso es solo una vaga ilusión de paz, la Paz que el SEÑOR da a todo aquel que cree en ÉL, es indescriptible y maravillosa. JESÚS dijo: "La Paz os dejo, Mi Paz os doy; Yo no os la doy como el mundo la da" (Juan 14.27a).
El mundo ofrece una paz que puede ser rota por el más mínimo error o diferencia entre las partes. Pero la Paz que DIOS da, trasciende todas las barreras e incluso es eterna. Además, el SEÑOR no solo puede darnos paz en determinados momentos de nuestra vida, sino que al mismo tiempo, puede darnos la Paz que perdura en el tiempo.
A veces los problemas y las dificultades de la vida nos hacen estar incómodos y pueden hasta quitarnos el sueño. Sin embargo, la Biblia dice que podemos dormir y descansar tranquilos porque en el SEÑOR hallamos paz y seguridad; en ÉL podemos confiar y descansar cada día. David expresó su confianza en el SEÑOR, al decir: "En paz me acostaré, y asimismo dormiré; porque solo Tú, JEHOVÁ, me haces vivir confiado" (Salmo 4.8).
Para tener la Paz de DIOS en nuestras vidas es necesario conocerlo a ÉL, para así recibirla de ÉL. Así que, podemos a través de la oración, acercarnos a ÉL con seguridad y pedirle que nos llene con Su Paz, y ÉL lo hará.